Experiencias cognitivas
Los juegos de clasificación. Clasificar los juguetes en diferentes tipos, diferentes formas y colores anima a tu hijo a notar las similitudes y las diferencias. Además enseña habilidades básicas de lógica.
Si parece listo para un desafío adicional, hazlo ordenar los elementos primero por el color y luego por la forma. Para aumentar un grado de dificultad, pídele ordenar todas las manzanas amarillas, los círculos rojos y así sucesivamente. Pero siempre en un tono divertido, sin esperar que lo haga a la perfección.
Descifrarlo. Proporciona a tu hijo rompecabezas de hasta cinco piezas grandes y anímalo mientras trata de colocarlos.
Decirle porqué. Tu hijo puede tener una interminable curiosidad a esta edad mientras trata de entender cómo funcionan las cosas y por qué son como son. Tus respuestas a sus preguntas pueden ser simples "¿Por qué tengo que ir a la cama?", "Debido a que tu cuerpo necesita dormir para crecer y mantenerse sano". Pero sus preguntas se pueden volver más difíciles, "¿Cómo respiran los peces?", "¿Por qué muere la gente?" No te preocupes sino tienes la respuesta correcta. Está bien decir que no sabes o que vas a tener que pensar en ello y estarás en contacto con él para responderle más tarde, incluso podrías sugerir hacer un poco de investigación juntos.
Limita los aparatos electrónicos. Eso incluye la televisión, computadoras y otros dispositivos. Aunque sean atractivos y divertidos, la mayoría de los juegos que tu hijo debe conocer, son mucho más activos, que implican interacciones cara a cara con personas reales y experiencias táctiles con los juguetes y sus alrededores.
Experiencias motrices
Brinquen. El equilibrio es una habilidad en desarrollo a esta edad. Vean quién puede pararse en un pie por más tiempo o saltar más lejos.
Los juegos de pelota simples. Proporciona a tu hijo una variedad de pelotas para niños de diferentes colores. Él, a esta edad, va a disfrutar practicando su lanzamiento, su patada y su habilidad para atrapar.
Mantén la calma. Trata de no mostrar miedo, alarma o queja excesiva sobre caídas y arañazos. Son una parte importante e inevitable de la construcción de la coordinación, la conciencia de espacio y de aprender a tomar mejores decisiones.
Consulta a tu médico.
